El aula invertida o “flipped classroom” es una metodología de aprendizaje en la que la enseñanza tradicional se “invierte”. Las explicaciones del profesor se proporcionan mediante video-lecciones y actividades, entre otros recursos, que los estudiantes ven de forma individualizada o grupal antes de clase. De esta forma, en el aula se pueden llevar a cabo más actividades de aprendizaje centradas en el alumno, permitiendo que las asignaturas tengan un carácter más interactivo.
Esta metodología de instrucción sostiene que resulta beneficiosa en la participación y el compromiso de los estudiantes, logrando un aprendizaje más significativo que con una metodología de instrucción tradicional. Este trabajo estudia los efectos del aula invertida en el rendimiento, la percepción y la emoción para maestros en formación en ciencias durante dos cursos.
Los resultados indican que los estudiantes mostraron percepciones favorables y emociones positivas hacia el aprendizaje de contenidos científicos al seguir el modelo de aula invertida.